Ciertamente todos buscan una mejor noche de sueño. Cada mañana, muchos de nosotros nos despertamos con los ojos aturdidos, prometiéndonos: "Esta noche, voy a acostarme más temprano". Y a veces lo hacemos, y a veces no. A veces dormimos terriblemente; a veces pensamos que hemos dormido bien, pero todavía nos sentimos cansados durante día.
Cuando se trata de hacer un seguimiento de nuestro sueño, no siempre es fácil interpretar los datos, y mucho menos saber cómo mejorar. ¿Qué significan todos los gráficos? ¿Cuánto sueño profundo necesitas? ¿Y tu tabla de sueño debería verse realmente así?
Para este artículo hemos hablado con expertos en sueño y probamos una variedad de rastreadores para tratar de encontrar las respuestas que estás buscando.
Prácticamente todos los rastreadores de ejercicios tienen la capacidad de mapear tu sueño durante la noche, pero no todos funcionan igual.
Todos ellos monitorean continuamente tus movimientos durante el sueño (conocidos en el mundillo del monitoreo de sueño como los círculos del sueño o actigrafía), y evalúan los ciclos de sueño para ver si estás en un sueño profundo o ligero.
Antes de continuar te recomiendo que veas nuestra selección de Smartwatches con Monitorización del Sueño.
Sin embargo, algunos usan solamente acelerómetros para hacer esto, mientras que algunos rastreadores han comenzado a incorporar datos de frecuencia cardíaca para tener una mejor idea de qué tan profundo estás en tus sueños.
Toda esta información recabada durante la noche se le presenta a la mañana siguiente, generalmente como un gráfico en la aplicación de tu SmartPhone.
La mayoría de los monitores te darán un cálculo estimando de cuántas horas de cada tipo de sueño ha disfrutado a lo largo de toda la noche y también con qué frecuencia se ha despertado (siempre y cuando tu reloj inteligente mida las pulsaciones) .
Además si tienes un Smartwatch que también mide la frecuencia cardíaca, también podrás ver cuánto tiempo pasó en el sueño REM, ya que esto es algo que se puede calcular cuando tu frecuencia cardíaca se introduce en el ecuación.
Algunos de los dispositivos también rastrean el sonido para grabar cualquier ruido fuerte durante la noche y de esta forma ayudar a explicar por qué te despertaste.
Además existen otros dispositivos como el Beddit 3 que usa un sensor de balistocardiografía (BCG) escondido debajo de las sábanas para rastrear la calidad y duración del sueño, teniendo en cuenta la frecuencia cardíaca y ritmo respiratorio.
No podría faltar también un micrófono para detectar ronquidos, que lógicamente puede ser un buen indicador de la calidad del sueño.
Mientras tanto, otros dispositivos como el ResMed S + detecta sus patrones de respiración desde lejos para tratar de determinar en qué etapa del sueño se encuentra.
Hay que tener en cuenta que no son tan precisos como los equipos profesionales de monitoreo del sueño o las pruebas de laboratorio.
Además las bandas de ejercicio pueden ayudar a tener una imagen incluso más clara de tus ciclos de sueño. Los dispositivos de cama o Smartwatches, tal y como se trata en este artículo, pueden ayudar bastante, pero una vez más, fuera de las condiciones de laboratorio en las que normalmente se hacen todas estas mediciones, puede ser difícil obtener una lectura precisa todas y cada una de las noches.
Pero podemos pasarnos todo el día explicando la forma en la que un Smartwatch monitorea el sueño, pero realmente, debemos aprender a interpretar estos datos si queremos que sean realmente útiles.
La mayoría de nosotros todavía pensamos que dormir ocho horas seguidas es suficiente, esto no tiene en cuenta la cantidad de veces que nos despiertamos o cuánto tiempo pasa en cada ciclo de sueño. Esto también cambia de persona a persona, la cuestión es la cantidad de sueño que necesitamos para sentirnos bien y descansados al día siguiente.
Una buena noche de sueño consiste en alrededor de cinco o seis ciclos de sueño. Un ciclo consiste en lo siguiente:
-Etapa 1: el estado somnoliento y relajado entre estar despierto y quedarse dormido. Ese estado en el que nos encontramos cuando estamos viendo una peli y nos entra mucho sueño.
-Etapa 2: Un sueño más profundo donde la temperatura de tu cuerpo se enfría un poco y se desconecta de su entorno.
-Etapas 3 y 4: "sueño profundo". Es más difícil despertarse del sueño profundo porque es cuando hay la menor cantidad de actividad en tu cuerpo. También es la parte del sueño donde el cuerpo se reconstruye y restaura la energía. Además también se liberan ciertas hormonas.
Después de un sueño profundo (última etapa), volvemos a la etapa 2 durante unos minutos antes de entrar en el "sueño de sueños", conocido como sueño REM (movimiento ocular rápido).
Cada ciclo dura alrededor de 1,5 horas y necesitamos experimentar las cuatro etapas para descansar de verdad durante la noche.
Lamentablemente, no existe una tabla de sueño perfecta, pero si duerme como un bebé y te despiertas renovado, tu tabla seguramente mostrará una ola constante de picos y valles (como la que se muestra en la siguiente imagen un poco más abajo).
En términos generales, una buena noche de sueño consiste en ciclos que duran alrededor de 90 minutos. Ten en cuenta que, normalmente, por cada ciclo que pasa la persona se vuelve a dormir un poco menos profundo. Este gráfico es típico de una persona que ha tenido una buena noche de descanso.
Y aunque algunas bebidas pueden ayudarte a conciliar el sueño mayor rapidez, puedes ver en este gráfico que también pueden conllevar mucho menos sueño profundo, es decir, estarás más inquieto y te despertarás antes de lo habitual.
Además el alcohol también tiende a mantener su ritmo cardíaco más alto.
Pero como explica el profesor Colin Espie, experto mundial en sueño de la Universidad de Oxford:
"Cada monitor de estado físico varía en relación a los distintos datos que monitorea, los métodos utilizados para registrarlos y la retroalimentación dada sobre los datos recopilados. Puede que tenga que convertirse en su "propio detective" para descubrir cómo los datos rastreados se correlacionan con cómo se siente durante el día"
A continuación exponemos un par de gráficas que podrían ser de igual manera orientativos a la hora de decidir si ha sido una buena noche de descanso o no.
Espie continuó:
"El número de horas de sueño que necesitas son tan independientes de una persona a otra como el número de zapato que utilizas. No asumas que necesitas las frecuentemente citadas siete a ocho horas, de hecho, un sueño más corto puede significar una mejor calidad de descanso."
El secreto, según el profesor, es
"Descubrir el sueño que usted personalmente necesita, y luego hacer de eso su patrón de sueño".
Para de alguna forma medir cuánto sueño necesitas, lo mejor sería analizar cómo te siente a lo largo del día con diferentes horas de sueño.
¿Te despiertas somnoliento después de nueve horas de descanso y luchas por salir de la cama?, o por el contrario ¿Eres más productivo si comienzas el día temprano?
En terminos generales y a forma de orientación, los recién nacidos necesitan aproximadamente 12-18 horas, los niños podrían rondar en torno a las 10-11 horas, los adolescentes (al contrario de lo que todos puedan pensar) solo necesita alrededor de 8,5 horas de sueño, y por último los adultos tendrán suficiente con entre 7 y 9 horas al día.
Como puedes ver, nadie puede funcionar a lo largo del día con tan solo cuatro horas de sueño y esperar mantenerse en forma y saludable toda la vida.
El profesor Espie nos da algunos consejor,
"Hay muchos pasos prácticos que puedes realizar a lo largo del día para hacer más agradable la hora dormir, desde hacer algo de ejercicio hasta reducir cafeína después del almuerzo ".
También nos recomienda desarrollar tu propia "rutina de relajación", es decir, aproximadamente de una hora a una hora y media antes de irte a la cama, evita cualquier actividad 'estimulante' como hacer ejercicio, apagar los dispositivos electrónicos y darse un tiempo para relajarse.
Realmente es más fácil decirlo que hacerlo, especialmente si te gusta salir de noche, etc, pero si lo llevas a cabo disfrutarás de dormir mejor. A continuación te ponemos algunos otros trucos, que también te servirán:
"Respetar un horario de descanso es una parte fundamental para tener un sueño saludable", sugiere el profesor Espie.
"Dale algo a tu mente en lo que concentrarse; Una técnica que se ha demostrado que funciona es usar imágenes. Imagina una escena que es calmante y relajante como por ejemplo caminar por tu parque favorito o navegar con una brisa suave, en definitiva, algo que es atractivo en lugar de emocionante para el cerebro."
Si no estás seguro de como debes interpretar tus datos de sueño, aplicaciones como Sleepio se sincroniza con datos de dispositivos de rastreo de sueño, como los smartwatches, para ayudar a construir un plan semanal, utilizando técnicas de TCC (terapia cognitiva conductual).
De esta forma ayudarás a entrenar tu mente y tu cuerpo para que duerma mejor.
Debes tener cuidado con los factores externos que pueden afectar tu sueño. La luz, el sonido e incluso el polvo son cosas que pueden interferir con el descanso. Si cree que tu sueño no es normal, puedes intentar determinar cualquier factor externo que pueda estar causando esa falta de descanso. Dispositivos como el Withings Aura te ayudarán en esta tarea.
Todo esto es muy interesante, pero como siempre hay que tener cuidado, ya que el sobre-análisis del sueño puede terminar teniendo el efecto inverso. Disfrutar de la mejor calidad de descanso es muy importante, pero obsesionarse demasiado provoca estrés que a su vez podría provocar que no duermas bien.
Ningún rastreador es perfecto, por lo que debe sopesar lo que le sea más útil en su caso en particular.
Simplemente el hecho de preocuparse por no dormir, pensar en la lista de tareas pendientes en el trabajo o el estado de tu cuenta bancaria, como todos sabemos, provocará que sea más difícil dormir, pero ¿cómo puedes dormirte más rápido?.
Depende de la persona, pero si sigue estos consejos seguramente te ayudarán a pasar una mejor noche: